domingo, 21 de junio de 2009

El Club del Clan

El Club del ClanEl Club del Clan

El Club del ClanEl Club del Clan


Año 1962. Suele decirse que, en aquella época, los chicos eran más ingenuos, existían los ideales, había más inocencia. La televisión también era distinta y reflejaba ese espíritu: Pepe Biondi, Carlos Balá y José Marrone tenían millones de seguidores.

"El club del clan", idea de un directivo de la RCA Víctor Argentina llamado Ricardo Mejía, salió al aire por canal 13 en noviembre de 1962. Basado en programas musicales extranjeros, cada emisión mostraba a un grupo de amigos que se reunía para cantar, charlar y divertirse. Los sábados a las 20.30, antes de ir a bailar, era común que los chicos se apostaran frente al televisor para imitar las coreografías y cantar junto a sus nuevos ídolos. Por primera vez, en castellano.

Antecedentes. En 1961, Ricardo Mejía había producido "La cantina de la Guardia Nueva", por canal 11. Conducido por Dino Ramos, los artistas recreaban un restaurante donde tenían lugar los sketches cómicos. Algunos integrantes del clan salieron de la Guardia Nueva. Otros ciclos que anticiparon el boom del clan fueron: "Ritmo y juventud" (canal 11), "Swing, juventud y fantasía" (Canal 7) y "La ola intermedia" (canal 13).

Rating. El fenómeno del programa atravesó las fronteras. Muchos países de América latina tuvieron sus versiones del Club. En 1963, el programa se convirtió en la Argentina en el segundo en audiencia, luego de "Viendo a Biondi", con 55.3 puntos.

Los personajes. Cada artista tenía un look definido y, en general, tomaba como modelo a una figura musical de la época. "El club del clan" logró la proyección de muchos de los jóvenes de su elenco, ignotos hasta entonces. Actualmente, algunos de ellos continúan en la industria de la música. Otros tuvieron un estrellato fugaz. Entre los más destacados, estaban:


Violeta Rivas: de formación musical, su voz no tardó en imponerse como la favorita del público. Cantaba temas traducidos al castellano de Mina y Rita Pavone.


Palito Ortega: Mejía le dijo un día "Usted no se ríe más" y así fue. Dejó su antiguo apodo "Nery Nelson" y se incorporó al programa como "el muchacho triste" del grupo. A pesar de esto, se convirtió en la figura indiscutida con temas (para nada melancólicos) como "Camelia", "Despeinada" y "Media novia".


Chico Novarro: daba el toque tropical. Se destacaba como compositor de boleros y temas pegadizos como "El camaleón" y "El orangután".


Johny Tedesco: versión criolla de Elvis, de quien tomó su repertorio. Impuso una moda con los pulloveres llamativos que usaba en cada programa (algunos tejidos por sus mismas admiradoras).


Lalo Fransen: catalogado como el playboy del grupo, cantaba canciones de amor. Su imagen era la de un muchacho de clase alta.


Raúl Lavié: antes de entrar en el programa, cantaba tangos con la orquesta de Héctor Varela. Sus temas eran melódicos.


Jolly Land: rubia, extrovertida, conquistó a Ricardo Mejía, con quien se casó y tuvo dos hijos. Algunos atribuyen a esta relación la excesiva promoción que se le dio dentro del programa.


Nicky Jones: de aspecto japonés, se vestía con camisas hawaianas y guirnaldas de flores en el cuello. Sus canciones eran humorísticas.

Raúl Cobian ("Tanguito"), Rocky Pontoni, Perico Gómez, Galo Cardenas, Cachita Galán, Horacio Molina, Pino Valente y Dolores de Cicco completaban el elenco.

El periplo. En 1964, canal 9 les ofrece pagarles diez veces más a los principales integrantes. Palito Ortega, Chico Novarro, Violeta Rivas, entre otros, se pasan a "Sábados continuados", conducido por Antonio Carrizo.

Ese mismo año el programa pasó al canal 7 como "Idolos de la juventud". En 1968, también con Carrizo como presentador, los ex club del clan participan de "Bienvenido sábado".

Mientras tanto, Ricardo Mejía continuó en el 13 con nuevos cantantes. Fernando de Soria, Gino Renni, Anita Martínez y Rolo Puente estaban entre los contratados para esta segunda etapa.

Año 1964. A modo de despedida, el 12 de marzo de 1964 se estrenó la película "El club del clan". Dirigida por Enrique Carreras, cuenta las aventuras de "los club del clan", que tienen que hacerse pasar por criados de la casa de uno de ellos para evitar que el padre se entere de un casamiento secreto.

Los tiempos cambiaban. En la Argentina ya habían desembarcado Los Beatles, una ola imparable que arrasó con todo lo anterior.
Fuente: Virginia Lauricella :Especial para LA NACION LINE